Quería comprobar que el amor que daba, estaba en mí, y no en los demás, y lo supe cuando me volví a enamorar, con miedo, pero podía querer de nuevo. Parece que querer lleva siempre a una encrucijada, donde te encontrás preguntándote ¿qué quiero? Sé lo que quiero, pero también se me es inviable ahora, sola o con alguien, lo que quiero, hoy, hoy no existe. ¿Podré estar bien como para acompañar a alguien más? ¿Podré tener respuestas cuando alguien me diga "ya no quiero más"? ¿Cómo puedo cumplir mi deseo de apoyar a alguien sin ser de la manera que pienso?

 ¿Cómo comparto el dolor que siento dentro si siempre defiendo al agresor?

"el agresor", me suena hasta incluso fuerte decirle así.

Limpió el caos, pero también hizo cosas que no detuve, pero que tampoco era consiente para aceptarlas.

Siento que me fallé a mi misma, y me está rompiendo por dentro.

Y no quiero que me juzguen por eso.

Se me caen las lágrimas sólo al pensarlo,

al escribirlo por primera vez.

No sé como sentirme además de avergonzada.

Quería que me pidieras perdón, de una manera en que yo lo aceptara. Quería que quisieras arreglar todo lo que se rompió. Soñaba con que volvías, pero la realidad era otra. Seguí la vida al ritmo que iba, y la realidad y el sueño se rozaron cuando me hablaste, aunque fue sólo un instante. Lo primero que recordé fueron los días enteros llorando, con el dolor en el pecho, yendo a psicólogo casi a diario para poder dejar de llorar aunque sea un rato. Me siento agredida cuando hablas, me siento despreciada, siento como me hago chiquita y cómo necesito mis limites más altos. No puedo tolerar que me hables diciéndome "ya te lo dije", yo lo veo como que me sobras y que me basureas. No puedo volver a ese lugar donde estoy esperando, pidiendo que me expliquen. Yo entiendo que vos haces las cosas cuando podes/querés, pero eso no quiere decir que yo tenga que esperar. Valgo mucho más que eso. Me encantaría que nos entendiéramos, pero la realidad es otra, la realidad es que yo termino atrás de vos, viendo como estás, esperando una señal. No puedo vivir así, quiero ser feliz, quiero dormir normal, no dieciséis horas, no tres. Quiero estar tranquila, no esperando a que alguien decida si me quiere en su vida.

2/2

La nostalgia de tu mano,

Los nervios de verte,

Aunque te odie

Mi corazón te siente.

El agua del adiós,

El habla forzado,

Aunque te ame

Mi alma te repele.

La crueldad de la realidad,

El dolor sin honestidad,

Lo que no es la amistad,

Tal vez, mejor la soledad

 Creo que nunca elegí realmente a alguien.

Siempre fue un "me gustas" que venía de afuera, un "mira, es bonito, y tienen edad similar", un sacudón de otro lado que me decía "él puede ser". Así acepté un montón de veces, veces que realmente me hicieron feliz, y veces que realmente me pregunto "¿qué hacía ahí?

Hasta que te vi. 

Te vi, me encantó tu amabilidad, tu cara, tu pequeña sonrisa simpática. No sé si te elegí, o si fue tu atención hacía mí lo que me hizo notarte. Pero lo tome como mi primera elección y así la viví. 

Cuando pude acercarme, tenía miedo.

No quería equivocarme, no quería ver que no eras lo que quería, aunque cada vez demostrabas ser más. Empecé a soltar el miedo y a actuar como las pocas veces que me enamoré. La respuesta me llenó de confusión y miedo, y tras hablarlo pensé "bueno, es el primer mes".

Hasta que terminó y me quedé con gusto de "¿qué fue?"

Él decía cosas que no podía cumplir. Me di cuenta que dijo "sí" a muchas cosas que no quería ¿quién es? ¿cómo puedo seguir queriendo a alguien que no sé quien es? Sí, el dejó de elegirme, pero ¿por qué yo sigo eligiendo? ¿Será el poder de mi primera decisión? ¿Es el no querer dejar la idea de familia esfumarse como si nada? ¿Es que lo que mostró y dijo hace que sostenga algo tan irreal como su existencia en mi mente? 

No sé quien sos.

No tengo idea de quien es. No sé nada de lo más profundo de él. Sí, conozco parte de su historia, pero no de lo que eso hace en él. En el camino perdí un trozo de mí, o tal vez varios, muchos ya los estoy recuperando porque son parte de mí ¿que pasa con los trozos que te di? Capaz nunca vuelvan, capaz forme nuevos. Sólo me queda esperar a ver la vida pasar hasta que llegue el momento que la pueda disfrutar